Hace varios siglos, en una remota e inaccesible región montañosa del sur de Siberia, los médicos primitivos descubrieron una raíz que aumentaba la longevidad y energía, a la que llamaron "raíz del Maral", debido a que una variedad de venado local -el Maral- desenterraba e ingería estas raíces durante la época de apareamiento, cuando los machos pelean entre sí para obtener el control de la manada y de las hembras en celo, para reponer sus gastadas energías. A raíz de ello, comenzaron a utilizar la planta para incrementar su potencial energético y retardar el envejecimiento, elevando el promedio de vida en la zona a 100 años. Estos médicos primitivos emplearon el extracto de la raíz del Maral contra el cansancio físico, luego de enfermedades agotadoras, para contrarrestar la debilidad senil y la disminución de las funciones sexuales. Sin embargo, solo unas pocas personas conocían los lugares donde crece la planta y este conocimiento fue pasado de una generación a otra. En el